Casa Común | Un balance esperanzador de la Fiesta Nacional de la Orquídea
En una nueva edición de Casa Común, el espacio de la Dirección de Medio Ambiente y Salud Animal de la Municipalidad de Montecarlo, hicimos un alto en la rutina para compartir un balance de lo que fue la Fiesta Nacional de la Orquídea y Provincial de la Flor.
Esta vez, el formato cambió un poco: el anfitrión del segmento, Juan, invitó a un amigo de la casa —Don Pepe Levy— para conversar de manera más distendida sobre lo vivido durante estos días tan significativos para la comunidad montecarleña.
Desde el inicio, ambos coincidieron en destacar la madurez y la unión del pueblo, reflejadas en la participación masiva de clubes, organizaciones e instituciones locales desde la caminata inaugural hasta los últimos eventos del parque.
“Nos demostró que podemos trabajar juntos, aun pensando distinto. Lo que se vivió fue un encuentro genuino, una muestra de esperanza colectiva”, señaló Juan.
La conversación repasó los grandes logros de esta edición: la presencia de entre 6.000 y 7.000 personas en el parque, la participación del gobernador de la provincia —algo que no sucedía desde 2012—, y la llegada de visitantes de distintas provincias y países, entre ellos Paraguay y Brasil.
El trabajo previo se sintió en cada detalle: desde el mantenimiento del parque y el asfaltado interno, hasta la organización de actividades culturales y la exposición récord de 455 orquídeas en flor, un número histórico para la muestra.
También hubo espacio para el reconocimiento a las más de 50 empresas locales que colaboraron con materiales e insumos, y al equipo humano que, con esfuerzo conjunto, logró que todo saliera sin imprevistos.
“Este resultado es fruto de un trabajo mancomunado y de la confianza que se fue reconstruyendo entre generaciones. Jóvenes y referentes históricos de la fiesta se unieron por un mismo fin”, destacó Juan.
El programa también adelantó los desafíos que vienen: regularizar la comisión promotora, mantener y mejorar la infraestructura del Parque Juan Vortisch, continuar con la recuperación del laberinto verde y abrir el predio durante todo el año para el disfrute de vecinos y visitantes.
La charla cerró con una mirada optimista:
“El balance es positivo, pero sobre todo nos queda un sentimiento de esperanza. La vara se elevó, y eso nos impulsa a seguir creciendo, juntos, como comunidad.”




